Por. El Padrino
Terminó el mundial de fútbol 2022 y Argentina es campeón. Final disputada con todos los ingredientes para la clausura de esta competencia. Ninguno de los dos equipos se guardo nada, un primer tiempo donde el equipo suramericano demostró superioridad que fue reflejada en el marcador, pero promediando el segundo tiempo Francia resucitó cual Ave Fénix e igualó el marcador y estuvo a punto de ser el campeón.
El doctorado que le faltaba a Messi, más que merecido ya que fue su adiós a los mundiales. Cuando el camino al título se hizo estrecho a lo mejor recordó ese poema de Celedonio Flores hecho tango (Porque canto así), …”me fui modelando en odio, en tristeza, en las amarguras que da la pobreza, en llantos de madres, en las rebeldías del que es fuerte y tiene que cruzar los brazos cuando el hambre viene”…, y no se rajó, no desentonó; al contrario fue por el tercer gol y parodiando otro tango (Así se baila el tango), …”aquí está la elegancia, ¡Qué pinta!, ¡Qué silueta!, ¡Qué porte!, ¡Qué arrogancia!, ¡Qué clase”… Sacó todo su repertorio, la madurez mental y futbolística para no caer presa de nerviosismos, distracciones o provocaciones que lo apartaran del partido y mantuvo la unidad del grupo por encima de algunos yerros, incluso tuvo unos detalles irreverentes, un bajonazo que se vió cuando salió del terreno Di María, él que proponía el mano a mano, además de la fatiga que empezaba a hacer mella en algunos jugadores albicelestes, en esto, los franceses parecían más resistentes.
Vaya que padecimos en esa final, pero eso lo hace más grande, atrás quedan los minutos angustiosos, la sacada monumental del portero Martínez, (tiene de genio y loco, ganó el pulso desde los doce pasos), terminando el tiempo reglamentario, los comentarios mal intencionados que Argentina compraba el campeonato. ¡A lo mejor sí! pero con sangre, sudor y sufrimiento. ¡Viva Argentina!, ¡Sos grande!. Bien por sur América. “Por todo lo que nos une, contra todo los que nos separa”.
También es justo reconocer que Francia fue un excelente rival, nunca se entregó y su estrella Mbappé es un digno aspirante a mejor jugador del mundo, que tome el relevo, le quedan años para ratificarlo.
