Por. Padrino Suárez
¡Campeón!, ¡Millonarios, campeón! Se hizo a la estrella 16, imponiéndose al Atlético Nacional, desde la definición de lanzamientos del punto penal pasa a ser el segundo equipo con más estrellas detrás precisamente de Nacional, recuerdo hace décadas cuando el equipo embajador ostentaba 13 estrellas y no se veía quien lo igualara, menos superarlo.
No fue sorpresa este título, ya que el presente del equipo azul es superior al de Nacional, pero a pesar de eso tuvo su momento de angustia al abrir el marcador el verde de Antioquia aunque no es menos cierto que las posibilidades después del empate fueron para los capitalinos, incluso de no ser por el portero Mier no se hubiera llegado a la definición del punto penal. Ganarle al equipo antioqueño le da un plus a 'Millos' ya que es su rival más enconado en cierto tiempo a la fecha, otrora lo fue América, antes Santafé, esta rivalidad se atizó a finales de los 80, cuando dirigió a los Millos Chiqui García, la selección Colombia Maturana y las controversias de Pimentel.
Lo bueno, el triunfo de Millonarios que le apostó a un proceso con Gamero, justo premio para el trabajo del samario. Lo malo, la insubordinación que se vio en Nacional por los cambios que propuso el técnico y a la postre los que tuvieron que mostrar la jerarquía: Dorlan Pabón, Jarlan Barrera y Cristian Zapata, en los cobros dejaron mucho que desear por lo que es acto de desacato los deja mal parados. Lo feo, sin tener nada de futbolístico, el grotesco espectáculo que protagonizó el Fiscal Barbosa, arbitrario, insolente, un acto propio de un integrante de barra brava más que de un representante de impartir "justicia".
Postdata: aplaudo el gesto de WIN junto con las alcaldías de Bogotá y Medellín de permitir ver el partido, dejando de lado el negocio del fútbol, que es particular o de interés público cuando conviene.
