Por. Nadia Patricia Suárez V.
1.540 casos efectivos en Colombia, durante el primer semestre del 2023, encienden las alarmas de las autoridades y especialistas e invita a trabajar por el cuidado de la salud mental y la prevención del suicidio, en especial en menores de edad.
Recientemente, la Procuraduría General de la Nación presentó un informe de alerta ante el incremento de trastornos mentales y alteraciones en la salud mental de niños, niñas, adolescentes y jóvenes en el país, quienes cada vez presentan más síntomas de depresión, ansiedad y trastornos de comportamiento; factores que a su vez influyen el consumo de sustancias psicoactivas, deserción escolar, intentos de suicidio y casos de suicidio consumado en el país. Según el Ministerio Público, en el primer semestre de 2023, fueron reportados 1.540 suicidios, de los cuales 479 fueron en jóvenes, 142 en adolescentes y 1 en infancia.
Ante este panorama, Metrópoli On Line acudió a Coherentemente, una empresa de salud mental para niños y adolescentes que trabaja en la prevención de conductas de riesgo, bajo el propósito de alcanzar la meta de cero suicidios en niños y adolescentes, donde la doctora María Isabel Guerrero Silva, coordinadora de la institución y psicóloga de infancia y adolescencia, especialista en atención clínica comportamental habló respecto a indicadores de atención y prevención del suicidio.
Metrópoli On Line: Doctora María Isabel, ¿Qué es el suicidio?
María Isabel Guerrero: El suicidio, creo yo, es el flagelo más grande que la humanidad está viviendo. Es la tercera causa de muerte a nivel mundial y es el desencadenante de la depresión. La depresión es la enfermedad que lleva al suicidio. El suicidio en sí mismo es el resultado de unos trastornos super grandes que se pueden presentar de diferentes maneras en niños, niñas, adolescentes, adultos. Es es predecible y es en sí mismo el desencadenante final de una enfermedad gravísima que es la depresión.
MOL: ¿Cuáles son esos puntos de alerta que hacen tomar conciencia que alguien podría caer en un suicidio?
MIG: Todos los síntomas depresivos son importantes de poder tener en cuenta y dependiendo la edad pueden variar. Si hablamos de niños, podríamos hablar de niños hiperactivos, niños que empiezan a tener un sentido del riesgo mucho más grande del que muchas personas podrían sentir. Niños que desafían la autoridad, que pueden mojar la cama o hacer 'pipi'(enuresis), niños ansiosos porque en la vida las cosas se solucionen mucho más rápido y niños que empiezan a tener señales de alerta ante cualquier situación: los cambios le cuestan trabajo, entrar al colegio los pone tristes, y empiezan a tener una conducta cuando están pequeños mucho más activa que hipoactiva.
Cuando van creciendo en la preadolescencia y la adolescencia aparecen los síntomas más propios de la depresión como el aislamiento, el decir que no valen para nada, que su vida no tiene sentido, el tener muy pocos motivos para ser felices, no poder dormir, dejar de comer, alejarse de los amigos, empezar a estar mucho más retraído de la sociedad. Esto empieza a mostrarnos que hay una falla significativa tanto en la parte escolar, como social, como en cualquiera de los roles que los niños o adolescentes desempeñan y empiezan a no estar presentes en las cosas que deberían estarlo.
MOL: Septiembre es el mes de prevención del suicidio, como sociedad y adultos, ¿Qué podemos hacer para prevenir el suicidio?
MIG: Lo primero que tenemos que hacer es hablar de suicidio. Hay un mito muy grande que nos dice que no se debe hablar de esto, y sí, deberíamos hablar de suicidio, deberíamos tener claro que se puede evitar. Cuando hablamos de las situaciones de riesgo hacemos que las personas tengan otras opciones donde se pueden sentir mucho mejor y encontrar esas señales de alerta, pero también, encontrar esos factores de protección nos van ayudar un montón. Hablemos de suicidio como el final de algo que tiene una causa que es la depresión. El suicidio es prevenible, es decir todos nosotros podemos hacer campañas para que las personas que amamos, nunca lleguen a cometer la única cosa que no podemos revertir que es la muerte.
MOL: ¿Cuál es la propuesta de CoherenteMente para prevenir el suicidio?
MIG: Nosotros somos absolutamente partidiarios de que en la vida siempre hay soluciones. De que tanto los trastornos depresivos como las crisis de ansiedad o la bipolaridad, que son como las crisis más grandes que pueden llevar a la depresión, tienen solución. Estamos aquí para brindar herramientas de apoyo a los padres, a las familias, a los colegios para prevenir situaciones de riesgo.
MOL: Cuando hablamos de una generación de cristal, ¿Los estamos señalando como propensos al suicidio?
MIG: Estamos hablando mucho de una generación de cristal donde creemos que nuestros adolescentes son más frágiles de lo que son. Ser de cristales es llevar encima toda una generación de dificultades que venimos cargando hace 3 ó 4 generaciones en donde no había consciencia del cuidado de la salud mental. Ahora ellos tienen consciencia de ello, por eso se ven más frágiles, porque pueden decir lo que están sintiendo, porque podemos ver hombres llorando, podemos ver adolescentes reconociendo que no están pudiendo hacer cosas que antes podrían estar dándose de las misma forma pero encubiertos. Ahora la generación de cristal, creo yo que se rompe ante los ojos de las demás generaciones pero van a ser una generación ejemplo con sus vidas porque son los que reconocen que existen dificultades. Entonces, yo los veo frágiles y los veo potentes. Creo firmemente en nuestra generación de cristal y creo que podemos hacer que sea un cristal mucho más duradero.
MOL: Finalmente, ¿Cuál sería su recomendación a padres de familia y sociedad en general para prevenir el suicidio?
MIG: Es muy importante que como adultos estemos conscientes de que el suicidio es una realidad, es la tercera causa de muerte en nuestros adolescentes a nivel mundial, es muy frecuente. La cifra es super grande en Bogotá, tenemos suicidios cada semana. En Bogotá tuvimos 3.564 casos el año pasado, 297 niños muriendo cada día. Así que (debemos) estar pendientes de las señales de alertas con nuestro hijos. ¿Qué es estar pendiente de las señales de alerta? Es tener dialogo abierto, es tener canales de comunicación afectiva, es hacer validación efectiva de las cosas que sienten nuestros hijos, es poder entender que lo que ellos nos dicen tiene un sentido. Entonces, estar presentes en la vida de nuestros hijos y ser padres coherentes ayuda a evitar este flagelo y a hacer que mi hijo no sea el que pase por ahí.
Entre tanto, la Procuraduría, a través de la Delegada para la Defensa de los Derechos de la Infancia, la Adolescencia, la Familia y la Mujer, hizo un llamado al sector salud, para que las consultas de psicología y psiquiatría, sean priorizadas, sin que se requiera pasar primero por una consulta con médico general.