Por. Metrópoli Online
@Metropolicol
En una sociedad preocupada por el cambio climático, el manejo de los residuos y la contaminación ambiental, industrias como la moda representan un desafío ante las escasas soluciones para la cantidad de residuos que origina y el desperdicio de agua para su producción.
Como respuesta y en contraste con este panorama, surge Cárica, el emprendimiento de Liz Pitta, Artista Plástica que adelanta estudios de Maestría en Diseño y se dedica a la transformación de desechos orgánicos en nuevas ideas. Durante tres años estuvo estudiando e investigando las propiedades de la semilla de papaya, cómo se pueden transformar, hasta generar un material similar al cuero.
"Proponer un nuevo material es muy difícil, todo se marca en tendencias y cuando se llega con una nueva propuesta de material, toca cambiar el chip de nuestro público para que digan que chévere usar esto. Porque proponer algo sostenible, el precio incrementa", manifestó Liz Pitta
Cuando cursaba el segundo semestre de la maestría y como parte de un trabajo de clase Pitta se unió la diseñadora digital Selene Orozco, con quien empezó a darle vida a los escenarios de comunicación de la empresa y a buscar procesos de innovación diferenciales para mejorar el producto. De acuerdo a esta unión, Orozco expresa que “queremos innovar más y más el material, evolucionarlo al igual que la industria textil a través de materiales que no contaminen que sean sostenibles y responsables con el medio ambiente. Queremos mantener la esencia y el origen de esta creación, donde se retome el hacer manual para crear un producto, en donde las herramientas y el material mantengan un dialogo intrínseco para crear una composición armónica finalizada en producto”.
Al final de la vida útil de las prendas, este material se puede utilizar como abono para plantas o retornarlo a sus creadoras para la elaboración de nuevos objetos. Conoce más de Cárica en nuestro Podcats disponible en Spotify y SoundClound.